Este espacio reserve para mi libro "Recomenzando la vida", !confirán!
Recomenzando la vida
Jennifer Barros
Capítulo I
Huyendo de la realidad y buscando la felicidad
Cerca de 2 años viviendo con Juan, en Valencia, Rosa Hernández decidió volver a la ciudad que vivía cuando joven, la decisión fue tomada debido los malos tratos constantes que recibía de su novio.
En el inicio de su relación, todo estaba caminando muy bien, pero Juan con sus celos exagerados empezó a demostrar un comportamiento agresivo y descontrolado, lo que fue la causa de Rosa decidir separarse y huir de él.
Ella huye con su hija Mariana de 11 años, para la hacienda de su ex-suegro, José Varela, que vive solito a años.
Rosa tiene ganas de recomenzar su vida en esta hacienda, que está en el poblado conocido como Estrella de la Mañana, cerca de la pequeña ciudad de Castellón de la Plana, donde vivió parte de su vida y posee recuerdos de hechos vividos.
Viajando por aproximadamente 3 días, Rosa y Mariana llegaron en la hacienda de José, que se quedó sorpreso, pero no muy contento, pues no esperaba encontrar su ex-nuera, que para él era la culpada de la muerte de su hijo Pablo.
En este día José conoció su nieta, que sin embargo, jamás supe que existía, al mirar la nieta aún con su manera de ser, inflexible, observó como la nieta se parecía con su hijo, la docilidad de la niña empezó a amollecer el corazón de José, un viejo que en las mayorías de los días presentaba aparentemente una expresión de no gustar de convivir con nadie, empieza a gustar de la presencia de su nieta en su hacienda.
Capítulo II
Un nuevo rumo
Al cabo de la noche, Rosa y Mariana se arreglaban en el depósito de herramientas de la hacienda, cansadas durmieron temprano, mientras esto José arregla su taller mecánico.
Por la mañana temprano, Rosa se despierta y va hacia la ciudad en busca de empleo, pues a pesar de esta en la hacienda necesita trabajar para sostener la hija.
Ella llega en una lavandería y de pronto conoce la dueña Paola que después de entrevístala, le contrató para trabajar.
En la hacienda, José continua a trabajar en sus atribuciones diarias, intentando arreglar de nuevo su coche viejo, alimentando sus pocos animales y ordeñando la vaca. Cuando Mariana despierta encuentra con su abuelo en la cocina, le pregunta se quiere desayunar y él contesta que sí, ella entonces prepara su única especialidad: pan relleno de jamón y queso, Mariana invita su abuelo para le ayudar, mientras esto le enseña a hacer el pan, ya tenía todo escrito en una hoja:
Pan relleno de jamón y queso
Ingredientes:
• 20 grs. de levadura
• 1 taza de leche a temperatura ambiente
• 50 grs. de manteca a temperatura ambiente
• 2 huevos
• 500 grs. de harina 000
• 1 cdita. de sal
Para el relleno:
• 200 grs. de jamón cocido picado
• 200 grs. de ricota
• 1 cda. de albahaca picada
• 2 cdas. de aceite
• 200 grs. de tomates peritas sin semilla cortados
• 1 cda. de orégano
• Sal y pimienta a gusto
• 1 huevo para pincelar
• Manteca y harina para la asadera
Preparación: Disolver en un recipiente la levadura con la leche, incorporar la manteca y los huevos, mezclar bien y agregar la harina junto con la sal de a poco, integrándola hasta formar una masa tierna.
Amasar hasta formar una masa tierna y lisa y armar un bollo. Colocarlo en un recipiente y dejarlo reposar cubierto con film hasta que duplique casi su volumen.
Volcar la masa sobre la mesa ligeramente enharinada, dando pequeños golpecitos para sacar el gas y estirar en forma rectangular. Cortar una tira de aproximadamente 5 cm de ancho por el largo del rectángulo de masa.
Mezclar en un recipiente los ingredientes del relleno, salpimentar, mezclar bien y extenderlos sobre el rectángulo de masa, dejando un borde libre, arrollar.
Disponerlo en una asadera previamente mantecada y enharinada, y pincelar con huevo batido.
Decorar cortando la tira de masa reservada en tiras más pequeñas y colocándolas en forma espaciada sobre el arrollado, terminar de pincelarlas.
Dejar levar durante 15 minutos y cocinar en horno precalentado a temperatura moderada, aproximadamente 20 minutos.
Después de desayunar ella decide ayudar su abuelo con las tareas de la hacienda, dejando José muy contento con esto, la compañía de la nieta hazlo muy feliz.
En la ciudad, Rosa y Paola sonríen juntas, pues nunca tantas personas fueron lavar sus ropas antes como en aquel día, todo por cuenta de la presencia de Rosa. Por el poblado ser pequeño las noticias se propagaban deprisa.
En este día Rosa conoció muchas personas del poblado, pero lo que llamó mas su atención fue el policía Jordano que con toda su belleza encantó los ojos y el corazón de la nueva habitante de la ciudad, ella conversó con él a respecto de la situación que vivía cuando estaba con Juan, le pidió seguranza para sí para su hija.
Al fin del día Rosa vuelve para la hacienda con su nueva patrona y amiga, que se propuso en déjala en casa, le presenta Mariana que se queda muy contenta en saber que la madre logró un empleo y agradece a Paola por ayudar la madre.
La amiga vuelve para la ciudad y madre e hija van a cenar para entonces dormir.
Capítulo III
La llegada de un amor
El sol nasce y el día promete, Rosa sale para trabajar. Se despide de su hija y va para la ciudad.
Paola su amiga, le recibe con una noticia inesperada, ellas ahora van a trabajar en un restaurante que Paola ha comprado. Muy contenta ellas empiezan a organizarse para entonces comenzar el día.
Al llegar ellas arreglan todo para la inauguración e ya abren para servir el desayuno para los clientes.
Mientras trabajaba ella recibió una invitación de la persona que le gustaba, el policía Jordano, que le invitó para después del trabajo, hacer un paseo y después la deja en la hacienda, sin dudas y muy contenta ella acepta la invitación.
Con tantas noticias buenas Rosa pasó el día radiante, y para completar los acontecimientos felices, su hija y José fueron hasta el restaurante para almorzar. Ella los recibe gentilmente, a pesar de José aún esta indiferente con Rosa, pero asimismo ella sírvelos con una sonrisa inigualable en el rostro.
Después del día de trabajo, Jordano va de encuentro a Rosa en el restaurante, ella se despide muy alegre de Paola, y sale con él.
Ellos cenan cerca de allí y después a camino de la hacienda él recita para ella un lindo poema de amor de su ídolo, Pablo Neruda:
Es la mañana llena de tempestad
en el corazón del verano.
Como pañuelos blancos de adiós viajan las nubes,
el viento las sacude con sus viajeras manos.
Innumerable corazón del viento
latiendo sobre nuestro silencio enamorado.
Zumbando entre los árboles, orquestal y divino,
como una lengua llena de guerras y de cantos.
Viento que lleva en rápido robo la hojarasca
y desvía las flechas latientes de los pájaros.
Viento que la derriba en ola sin espuma
y sustancia sin peso, y fuegos inclinados.
Se rompe y se sumerge su volumen de besos
combatido en la puerta del viento del verano.
Al termino del poema Jordano le pide en enamoro, encantada con la delicadeza de Jordano ella acepta y allí sellan el inicio de un amor verdadero, pasan la noche juntos y después él lleva ella de vuelta para hacienda y se despiden con un beso apasionado.
Capítulo IV
La verdad oculta
Por la mañana temprano José despierta Rosa brutamente para conversar, la misma se levanta si comprender mucho la situación.
Él pregunta se ella está con Jordano por amor o solo por seguridad, ella le golpea el rostro y revela lo que ocurrió en la noche del accidente.
Rosa dice que en la noche de la muerte de Pablo él le puso para manejar el coche y ella durmió en el momento en que otro coche pasaba, el accidente fue inevitable, llorando Rosa le di que Dios le dejo viva solo por el hecho de esta embarazada de su hija Mariana, pero se ella pudiese morir en el lugar de él lo había hecho.
Rosa no espera mas ningún minuto, arregla sus cosas y sale de la hacienda con Mariana, mientras José arrepentido mira ellas partiendo.
Ellas se quedan en la casa de Paola que sorpresa les acepta de brazos abiertos, pero Rosa no esperaba una cosa, Mariana se revuelta con ella y di que sus decisiones son inaceptables y ella siempre las decide sin pedir su opinión, ella entonces contesta diciendo que no es verdad que todo que hace es pensando en ella. Mariana sale de la casa corriendo y vuelve para la hacienda con su abuelo, Paola habla para Rosa no impedir pues es mejor así.
Capítulo V
¿Amigos de nuevo?
Entristecida por lo que ocurrió Rosa llama para Jordano y le explica todo, preocupado él va hasta ella y le conforta diciendo que todo va quedarse bien. Ella se arregla y va trabajar un poco más tranquila.
En el restaurante todo estaba caminando como siempre, clientes saliendo y entrando para desayunar y almorzar, de pronto José y Mariana llegan en el restaurante, sientan en el balcón esperan ser atendidos por Rosa, que llega cerca de ello y espera el pedido. José mira en sus ojos, le pide perdón y implora que ella vuelva para la hacienda, ella sonriendo acepta y abraza el diciendo que le perdona, José habla que no deseaba su muerte en el accidente, para él mejor sería tener los dos con él. Mariana sonríe para la madre y le besa feliz por la madre perdonar su abuela.
Al fin del día, cuando Rosa sacaba la basura para fuera del restaurante, aparece Juan por detrás de ella, asustada se aparta de él y pide para déjala en paz, él le pide para que vuelvas para él pues le ama y le quiere, pero ella no quiere e intentando entrar para el restaurante él le segura machacando su brazo forzando ella ir con él, desesperada ella grita pidiendo ayuda, Paola escucha y sala para ayudar su amiga, al mirar Paola él suelta ella y la amenaza.
Paola llama para Jordano, él llega allá Rosa le explica lo que ocurrió y después el lleva ella para la hacienda.
Al llegar en la hacienda ellos explican la situación para José y juntos ellos salen para procurar Juan y le expulsar de la ciudad. Lo encontraron en un hotel y lo pusieron en el coche de la policía, llevaron él para una carretera lejos de la ciudad y hablaron para él quedarse lejos de allí pues se volviese lo matarían.
Después de la “amorosa” despedida con chutes y tapas, José y Jordano volvieron para la hacienda.
Capítulo VI
¡La felidad, enfin!
Después de los varios sucesos que ocurrieron en la vida de Rosa, ella resuelve arreglar todas las cosas que le tracia recordaciones, coge su caja de recuerdos y empieza a mirar todo lo que tenía dentro, ella saco muchas cosas en la basura pero las fotos de Pablo ella entregó para José que lloraba al mirar las fotos de su hijo.
Luego, José mira que Rosa dejo un grande espacio en su caja de recuerdos y pregunta el motivo de esto, ella contesta que aquel espacio es para poner todos los registros de las nuevas experiencias que aún va vivir.
La felicidad allí se confirma con apenas una expresión de José: ¡Él simplemente sonríe!
“El tiempo pasa, pero el amor permanece”
Autor desconocido
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